Tailandia: Campamento de Elefantes

Korey Te Hira, estudiante de los últimos años de la carrera de economía y negocios internacionales en Nueva Zelanda, nos habla acerca de ser voluntario en un campamento de elefantes en el norte de Tailandia.

Mi compañero y yo queríamos pasar un par de semanas en un lugar cálido, y hacer algo más que simplemente ir a la playa. No tuvimos tiempo suficiente para una colocación voluntaria extendida así que buscamos proyectos que aceptasen personas por sólo un par de semanas. Es así como tomamos la decisión de ayudar en un campamento de elefantes en Tailandia.

korey-elephant

Fue una aventura desde el primer día. Acabábamos de llegar, pusimos nuestras cosas en nuestra habitación y enseguida estábamos ayudando a llevar los elefantes para un baño en el río. Una experiencia increíble - nos bajamos del autobús, y en minutos ya estábamos llevando elefantes al río!

Bañar a los elefantes es   algo que haríamos dos veces al día. Nos levantábamos a las 6 am, y lavavamos los elefantes por aproximadamente una hora. El desayuno era a las ocho de la mañana; que lo hacían a la orden. De hecho, toda la comida era muy buena. Luego, desde las 9:30 a las 10 ayudábamos diariamente con un espectáculo de elefantes, alentábamos al público a comprar la caña de azúcar y el banano para alimentar a los elefantes. Después de un almuerzo buffet para todos nosotros, debíamos darle a los elefantes su medicina, limpiábamos sus cajas y cosas por el estilo. Por la tarde, alrededor de las cuatro, bañábamos a los elefantes de nuevo.

Al trabajar directamente con los animales, se les llega a conocerlos bastante bien. Uno de ellos era muy desordenado al comer, otro era genial en las caminatas, y otro elefante era el pintor del campamento. Cada elefante tenía su propio entrenador, el cual cuidaba de cada uno de ellos. De modo que el personal era muy bueno y realmente conocía a sus elefantes.

En el medio de trabajo con los elefantes, todos tuvimos una buena cantidad de tiempo libre. Fue entonces cuando caminábamos por el pueblo, conocíamos a los lugareños. La mayoría no hablaba mucho Inglés, pero eran muy amable, cálido y acogedor. Una cosa que nos gustaba era jugar voleibol con los niños del pueblo, nuestros compañeros de trabajo y otros voluntarios. Realmente disfrutaba mucho jugar voleibol, ya que me hizo sentir parte de la comunidad y era una manera divertida de conocer a las personas. Estar en un lugar como ese es fácil hacer amigos. Nos amigos de otros voluntarios, y hasta ahora nos mantenemos en contacto unos con otros.

Pasamos dos semanas en el campamento, pero ojalá nos hubiéramos quedado una semana más. Tres semanas habría sido una cantidad ideal de tiempo allí. Para cualquiera que esté considerando este programa, yo diría que lo haga; no te arrepentirás. Me gustaría recomendar a la gente en trae libros, cartas y algún juego de mesa - cosas para entretenerse durante el tiempo libre de los elefantes. También animo a los voluntarios en pasar el tiempo en el pueblo, conocer a los lugareños, unirse a los juegos de voleibol. Ahí es cuando realmente te sientes que estás haciendo algo diferente y único. Es cuando sientes que eres parte de la comunidad, que es algo que nunca olvidaré.

Si deseas más información sobre este programa da click AQUÍ

 goabroad logo posner logo

   Member